En Brasilia, Brasil, un apartamento de 1022 pies cuadrados se ha transformado en un espacio acogedor que celebra tanto la funcionalidad como la nostalgia. Diseñado por Hersen Mendes Arquiteturael Apartamento Relicario – o “Apartamento Relicario” – va más allá de una easy renovación. Es un espacio que honra a la familia, la memoria y la belleza de envejecer rodeado de las cosas (y las personas) que más amas.
El proyecto comenzó cuando una hija se acercó a los arquitectos Anastácia Hersen y Matheus Mendes para reimaginar el apartamento de su anciana madre, convenientemente ubicado solo un piso debajo del suyo. El objetivo no period sólo modernizar el espacio, sino crear un hogar que pudiera servir como una extensión emocional del departamento de arriba de la familia: un ambiente cálido y accesible donde tres generaciones pudieran reunirse sin esfuerzo.
En lugar de despojarnos del pasado, los arquitectos optaron por celebrarlo. El apartamento, llamado cariñosamente Relicário, que significa contenedor para reliquias sagradas, está lleno de recuerdos de toda la vida del residente (tazas, recuerdos de viajes, fotografías y objetos) que se han convertido en parte de la arquitectura misma. Estos objetos preciados no se tratan como desorden sino como artefactos culturales que muestran una vida bien vivida.
En el corazón del diseño se encuentra la espaciosa sala de estar, donde las paredes se reconfiguraron para abrir las líneas de visión y fomentar la reunión. La cocina, que alguna vez fue cerrada y utilitaria, ahora se extiende a los espacios de sala y comedor. La integración de la cocina y la conversación hace que el apartamento parezca amplio y sociable.
Diseñar para personas mayores requiere empatía y la accesibilidad se ha abordado con sutil consideración. Los arquitectos implementaron una variedad de características que respaldan la autonomía sin siquiera sentirse clínicos. Los caminos de circulación más amplios garantizan la movilidad, mientras que los contrastes entre tonos neutros y vibrantes, particularmente entre la cocina y la sala de estar, ayudan a la orientación visible.
El equipo también prestó mucha atención a la iluminación y la materialidad, dos elementos clave para crear una sensación de tranquilidad y seguridad. La iluminación suave e indirecta scale back el deslumbramiento y las sombras, mientras que los acabados táctiles como la madera, los textiles y los tonos naturales añaden una sensación de calidez. Todo ha sido diseñado para resultar intuitivo, acquainted y tranquilizador, alineándose con la vida diaria de los residentes mayores.
Al ultimate del pasillo, hay un pequeño estudio casero lleno de luz que también funciona como sala de costura: un espacio privado para uno de los pasatiempos de toda la vida de los residentes. Equipada con un gran espejo y un cómodo espacio de trabajo, la habitación equilibra la practicidad con serenos tonos de rosa y azul.
En el dormitorio, un detalle bien pensado transforma la seguridad cotidiana en un elegante gesto de diseño: una estructura de cama personalizada con barras de apoyo integradas, disfrazadas de parte del mobiliario. De manera related, el baño combina practicidad y comodidad, incorporando elementos de apoyo directamente en los detalles arquitectónicos para que parezcan intencionales, no institucionales.
Para obtener más información sobre Hersen Mendes Arquitetura, visite hersenmendes.com.
Fotografía por Fred Schueler.




















